Es sabido que existe una relación muy estrecha entre la vitamina C y el sistema inmunitario. Esta vitamina, que los seres humanos no somos capaces de sintetizar, hay que obtenerla de forma externa, a través de la alimentación o en forma de suplementos. Las mujeres embarazadas, lactantes y también las personas que fuman, necesitan más.

escaramujo defensas

Además de ser tener conocidas propiedades antioxidantes que ayudan a contrarrestar los efectos de los radicales libres, el ácido ascórbico o vitamina C es una sustancia indispensable para formar anticuerpos, además de estimular la síntesis de interferón y de ser broncodilatadora. Es, sin duda, la reina a la hora de apoyar a las defensas.

La vitamina C en los alimentos: un nutriente sensible

Existen alimentos que son especialmente ricos en este micronutriente tan clave para reforzar el sistema inmunitario.

Siempre se ha recomendado un zumo de naranja para evitar los resfriados, porque las naranjas son una fuente importante de vitamina C. Sin embargo, los últimos estudios indican que este remedio casero es efectivo para acortar el tiempo de constipado, aunque no evita por si solo que nos acatarremos.

Entre los alimentos abundantes en vitamina C, encontramos la acerola, el escaramujo, los pimientos crudos, el perejil, el brócoli y demás crucíferas, los berros y los cítricos. Es importante tener esta lista en la cabeza para ir incorporando estos alimentos en las comidas siempre que sea posible y así asegurarse buenos niveles de esta vitamina, que ya hemos visto que es tan valiosa, sobre todo en esta época del año.

La mala noticia es que esta vitamina hidrosoluble es muy lábil, es decir, se pierde con facilidad por exposición a la luz, al oxígeno o al calor. De este modo, cualquier alimento del que queramos obtener vitamina C, debe tomarse crudo o apenas cocinado, algo que resulta más difícil en época de frío.

Escaramujo: vitamina C en abundancia

Este fruto rojo proveniente de un arbusto de la Patagonia argentina y chilena –la rosa canina– es, después de la acerola, el alimento con mayor contenido en vitamina C, de lejos. Mientras que 100 g de naranjas contienen alrededor de 50 mg de esta vitamina, la misma cantidad de escaramujo contiene unas 10 veces más.

Diferentes estudios han señalado que, entre las variedades de escaramujo, existe una superior en cuanto a su contenido en principios activos. A esta variedad se le dio el nombre de AP-4. Además, los escaramujos AP-4 también destacan por su contenido de ácidos grasos omega-3 y omega-6.

Sin embargo, el escaramujo no es tan fácil de incorporar a la dieta más allá de una mermelada o un té. Es por ello que, la manera más fácil de beneficiarse de él es, al menos en estas latitudes, en forma de suplemento alimenticio.

Una forma fácil y efectiva de tomar escaramujo

La casa alemana Raab Vitalfood ha elaborado un suplemento de máxima calidad y fácil de tomar: el escaramujo en polvo. Se trata de un producto elaborado a partir de la pulpa del fruto y de las semillas del escaramujo AP-4, cultivado en las zonas altas de los Andes chilenos. Las bayas se recolectan a mano cuando su grado de maduración es óptimo y, a continuación, se secan con mucho cuidado. La pulpa y las semillas se transforman en un polvo que sigue conteniendo los valiosos ingredientes del fruto.

El escaramujo en polvo de Raab Vitalfood contiene vitamina C en grandes cantidades y de manera muy disponible. Una cucharadita al día ya puede tener efectos positivos para el sistema inmunitario, sistema nervioso y tejidos que necesitan de este micronutriente (encías, dientes, piel, huesos). Además, es muy fácil de utilizar: se puede mezclar a la perfección con batidos, zumos o yogur, pero también se puede añadir a mueslis o a otras comidas dulces.