Shiitakes, canela, maca… y una chispa de alegría crujiente con palomitas aromatizadas con parmesano y flores de romero. Y sí, como ya sabréis, las flores se pueden comer, pero no solo aportan aromas y belleza al plato, además nos regalan multitud de beneficios. En concreto, las flores de romero contienen cantidad de vitaminas y minerales y son especialmente buenas para mejorar la digestión. O sea que, a partir de ahora, no desechéis las humildes y preciosas florecillas de las plantas aromáticas. Esta crema deliciosa es un superalimento que nos promete unas navidades intensas llenas de salud, energía natural y buen humor.
He utilizado el tupinambo como base para dar a esta crema una textura amorosa. Es un tubérculo de la familia de la alcachofa, originario de Sudamérica, pero hay cultivos de proximidad como los que he usado para esta receta que son del Pirineo de Lleida. El renovado interés por el tupinambo se explica por su alto contenido en inulina, una fibra soluble que, al llegar al intestino grueso, interactúa con las bacterias beneficiosas, estimula su desarrollo y evita, al mismo tiempo, la multiplicación de bacterias perjudiciales. ¡Y es que más del 75% de la fibra vegetal del tupinambo es inulina! Un auténtico regalo, ya que ayuda a controlar los niveles de triglicéridos, colesterol y azúcar en sangre. Tal vez el topinambur, aguaturma o alcachofa de Jerusalén no sea el tubérculo más bello, pero, al cocinarlo, vais a descubrir un sabor y una textura asombrosos.
Las sopas y cremas nos permiten combinar ingredientes con mucha flexibilidad y eso hace que sea muy fácil aumentar su valor nutricional. En esta receta, he añadido la maca como adaptógeno para garantizar energía natural y buen humor, canela para regular los impulsos de dulce y shiitake para reforzar el sistema inmunitario y evitar la inflamación. No tengo palabras para expresar la emoción que me despierta ver la marea del cambio en nuestra forma de valorar lo que comemos. La revolución ya está aquí, no importa que solos seamos una avanzadilla. Batidos, superalimentos, fermentados, germinados, alimentos sin colorantes, productos integrales, cultivos biodinámicos y de producción local… un interés evidente por lo verdaderamente natural, lo nacido de la tierra; el mejor plan de salud holística para alcanzar un bienestar sostenible.
La receta: Crema de superalimentos con palomitas aromatizadas
Ingredientes para la crema:
- 400 g de tupinambos
- 1 cebolla pequeña
- 15 g de shiitakes deshidratados (remojar en agua caliente 1 h antes)
- 3 tazas de caldo de verduras
- 1 taza de leche de almendras (sin azúcar)
- 1 c.p. de maca en polvo
- 1 c.p. de canela en polvo
- Aceite de coco
- Sal marina
- Pimienta recién molida
Ingredientes para las palomitas:
- Aceite de oliva virgen extra
- 40 g de maíz para palomitas (certificado eco)
- Parmesano rallado fino
- Ramitas de romero en flor
- Aceite de sésamo tostado
- Sal marina
Elaboración:
- Saltear la cebolla cortada en lunas en el aceite de coco con un poco de sal marina y pimienta molida. Cuando esté pochada, añadir los tupinambos pelados y cortados en cubos. Dejar cocer unos minutos y añadir los shiitakes escurridos junto al caldo de verduras. Cocinar a fuego lento durante unos 10-15 minutos y añadir al final la maca y la canela para que se integren los sabores. Retirar la olla del fuego y poner la leche de almendras para batirlo todo junto hasta obtener una textura fina. Reservar caliente.
- Preparar las palomitas calentando un poco de aceite de oliva en un cazo y añadir el maíz para que se impregne. Tapar el cazo y dejar que exploten sin dejar de moverlo. Retirar del fuego cuando paren de saltar. Poner las palomitas calientes en un bol y mezclar con el parmesano rallado al gusto y una pizca de sal marina.
- Servir la crema en boles individuales con las palomitas aromatizadas, las flores de romero y unas gotas de aceite de sésamo tostado.
Que lo disfrutéis,
¡Mucha salud!
