Como ya sabemos, es importante ser consciente de qué alimentos deben estar en la mesa en cada momento del año, tanto por ser respetuosos con lo que el cuerpo necesita como para apostar por un consumo cercano y de temporada que beneficie el cuidado del planeta.
En noviembre, el otoño ya es muy intenso y nos tenemos que empezar a preparar para el invierno; por eso hay que priorizar vegetales que requieren mucha lluvia y frescura. Pero no nos confundamos, ya que la lluvia llevará frescura al huerto y calor a la mesa ya que podremos aprovechar las raíces como la zanahoria, el puerro y la remolacha a través de platos deliciosos con las cremas calientes como protagonistas.
Las verduras cultivadas en la tierra son de temperatura caliente, por eso, aunque necesitan lluvias fuertes para crecer, mantienen internamente todo el calor del cultivo para trasladarlo al cuerpo y calentarnos desde dentro. Según esta perspectiva, ahora es hora de asegurar el toque de calor en la cocina y una cocción de facilite la asimilación, ya que el frío es el enemigo de la digestión. Por ello, conviene moderar el consumo de crudo según el estado interno de cada uno.
A continuación presentamos una lista de las frutas y verduras que deberíamos tener en la mesa a lo largo de este mes. Nuestro territorio es muy amplio y esto hace que haya pequeñas variaciones entre las zonas más cálidas y las más húmedas y costeras.