pasta pestoComer pasta por la noche, como plato principal, no tiene ningún sentido, “si no es que trabajamos de noche o vamos a salir de fiesta”, explica el nutricionista y fitoterapeuta Marc Vergés. ¿Por qué? Porque es un alimento energético; por eso es beneficioso para los deportistas, porque les aporta energía y porque, además, es fácil de digerir.

Ahora bien, la pasta puede aparecer, por la noche, como acompañamiento de platos principales, en pequeñas cantidades. “Si se hace así, el organismo sí le saca provecho, porque dispondremos de la serotonina necesaria para estar más felices y activos al día siguiente”, continúa explicando el nutricionista.
Sea como sea, la pasta es ideal para las comidas. A la hora de cocinarla, la mejor recomendación es hacerlo a fuego medio, que el agua no hierva a borbotones. También es aconsejable variar el tipo de pasta: hay que huir de la monotonía en la cocina. Justamente, la pasta es muy versátil y permite mil y una elaboraciones y acompañamientos.

Pasta saltada amb verdures

Pasta salteada con verduras
2 tazas de pasta integral hervida
1 taza de cebolla picada
½ taza de zanahoria picada en cuadrados o tiras finas
½ taza de brotes de soja
½ taza de la parte verde del puerro
Tofu cortado a dados
1 o 2 cucharadas de aceite de sésamo de aceite de oliva de primera presión en frío
1 o 2 cucharadas soperas de tamari
Unos vasos de zumo de jengibre fresco o ½ cucharadita de jengibre en polvo

– Calentar el aceite en una sartén.
– Dorar la cebolla durante unos minutos y luego añadir el resto de verduras y el tofu.
– Cuando esté todo dorado, añadir la pasta, el tamari y el jengibre, y mezclar unos minutos más. Servir caliente.

Extraído del libro Nutrición energética y salud. Debolsillo Clave.

Por ejemplo, si optamos por el pesto, podemos cambiar los frutos secos: no es necesario que siempre sea con piñones. También se puede hacer con verduras y salsa de tomate o con una crema de espinacas, que, por otra parte, “es excelente para los niños”, matiza Vergés. Más maneras: al estilo oriental, con salsa de soja y tamari. “Lo mejor es combinarla con un primer plato de verdura o ensalada, y no tanto con carnes”. O, si no, preferiblemente “como segundo plato”.

Otro capítulo: las pastas integrales, elaboradas con una harina de calidad. “Si tenemos que elegir una, primero van las integrales; y si no son integrales, al dente y con verduras “, afirma el nutricionista. Un truco para realzar su sabor es introducir en el agua de cocción especies como la cúrcuma, el ajo en polvo o el jengibre, o también aromatizar con tomillo y romero.

Si la preparáis para los más pequeños de la casa, pensad que los niños “tienen una demanda energética elevada, y que, por tanto, es un alimento necesario en su dieta”. Con la pasta es fácil porque les suele gustar, pero lo mejor es ofrecerles variedad, de cereales diferentes, como de arroz, de maíz, de cebada, de espelta o de quinoa. “Si hervimos la pasta en un caldo casero, estaremos aumentando la cantidad de vitaminas y minerales de la pasta, y eso siempre es muy interesante en la alimentación infantil”, concluye el nutricionista.

Trinitat Gilbert
Trinitat Gilbert

Periodista

  @trinigilbert