Plato principal | Montse Vallory, Jordina Casademunt
Un plato perfecto para el frío que os proporcionará calor y es perfecta para los pulmones. Y además es deliciosa!
Esta es una versión vegetariana sin lácteos de la “Crema de coliflor con tártaro de algas al curry y mejillones”, publicada en el libro Cocina con algas by Portomuiños. La nata queda sustituida por la crema de almendras blancas.
Para obtener una crema muy blanca se debe evitar dorar demasiado las cebollas y procurar que la coliflor quede al dente. Si la coliflor provoca gases, se debe escaldar antes de añadir a las cebollas.
La receta admite leche de avena en lugar de agua, y pimienta negra en lugar de nuez moscada.
El tártaro de algas al natural de Porto-Muiños da un punto festivo al plato, por la polaridad de sabores y la elegancia de la combinación de blanco y negro.
Es una propuesta cremosa sin necesidad de recorrer a los lácteos. La cremosidad se obtiene de la cebolla muy cocinada y de la untuosidad de la crema de almendra blanca. Es una sopa para cuando aprieta el frío e idónea para mantener los pulmones en forma.
La coliflor es una verdura muy rica en agua, minerales, fibra, vitaminas e hidratos de carbono. Cocinada en crema resulta un plato dulce y muy suave al paladar. De hecho, es ideal para personas que acostumbran a presentar ansiedad por el dulce, puesto que les ayudará a calmar el deseo por este sabor. Aparte, también es una buena fuente de vitaminas del grupo B, nutrientes necesarios para la salud del sistema nervioso. La crema de almendras blancas no sólo da una consistencia más cremosa al plato, sino que también es muy rica en calcio. Junto con las algas que se añaden a la presentación, es un plato muy adecuado para las personas interesadas en cuidarse los huesos.