“Si tu hijo no come fruta, no te culpes”, me dice Yolanda García, psicóloga, naturópata y nutricionista que apoya la dietética oriental. Según la constitución que tenga la criatura y según el peso, ni siquiera es necesario que se la ofrezcamos. ¿Por qué? Porque es mucho más importante que los niños coman cereales integrales (arroz, quínoa, mijo, avena…), ácidos grasos esenciales (pescado, aceites, semillas, frutos secos), proteínas de buena calidad y verduras.
“Los cereales aportan la fuente de energía necesaria para crecer. Los ácidos grasos esenciales son el material con el que se construyen el cerebro o los ojos, y se utilizan para muchas funciones neuronales. Las proteínas son la materia prima para fabricar los tejidos. Y las verduras son un equilibrador de la dieta”. Con esta pirámide descrita, las frutas supondrían un 5 %.
Así pues, un 5 % de la dieta diaria. Y, aun así, la Yolanda dice que hay constituciones y pesos que no deben comer fruta. ¿Qué constituciones? ¿Qué pesos? Se lo pregunto y empieza por las constituciones. “Las criaturas con debilidades digestivas, que no digieren bien, con poca energía, de tendencia miedosa, más vale que no coman fruta pero, si lo hacen, que sea cocinada, en forma de compota, por ejemplo”. La razón por la que es contraproducente que estas constituciones ingieran fruta es porque les costará digerirla y la energía disminuirá. En cambio, los adolescentes que practican mucho deporte y que necesitan relajarse, “es muy recomendable que coman fruta”.
¿Lo sabías? Fruta desecada
Una buena opción para ofrecer a los niños, sobre todo cuando pueden masticar, es la fruta desecada como las pasas, los orejones o los dátiles. Han perdido agua, han concentrado azúcares −y también calorías−, pero son “muy digeribles”, explica la dietista Yolanda García.
Continuamos con los pesos. “La cifra mágica de cinco piezas diarias está sobredimensionada porque, según el peso, la criatura necesita una u otra cantidad de fruta”. Pongamos ejemplos. Una criatura de 15 kilos puede tomar una pieza de fruta al día, “media por la mañana y media más por la tarde”. Una de 30 kilos, una pieza y media. Una de 60 kilos, que ya podría ser peso de adulto, que no tome tres piezas a la vez para merendar, “como tradicionalmente se ha recomendado a los bebés”. “El caso es que la fruta no debe restar espacio a otros alimentos importantes”. A la hora de argumentar esta última afirmación, Yolanda me pone el ejemplo de los bebés. “Tengo en la consulta bebés que toman los purés de fruta clásicos de la tarde, con tres piezas de fruta y galletas maría, y que por la noche no comen nada para cenar. Claro, normal que no quieran cenar, porque quedan llenos con la comida de la tarde, y la lástima es que entonces se pierden los alimentos más nutritivos”.
Por último, la nutricionista, que basa sus explicaciones en la dietética oriental, recomienda que las familias opten por las frutas ecológicas y aclara que el verano es la época más adecuada para comerlas. “La naturaleza da más fruta en verano por una razón básica: porque es refrescante, porque es la época que relaja la energía pero, aun así, si la criatura es friolera o cae enferma frecuentemente, mejor que no las pruebe ni en esta época”. “Ah!”, me dice, “y di que es un error mezclar frutas, sobre todo en los purés, porque los niños no aprenden bien los sabores de cada una de las frutas”. Y, además, para una buena digestión, mezclar cítricos con frutas dulces no es muy buena idea.
Calendario de frutas de proximidad
Según el Departamento de Agricultura, Alimentación y Acción Rural y la revista Cocina
Todo el año
Pera
Enero
Naranja
Mandarina
Limón
Clementina
Manzana
Febrero
Clementina
Manzana
Naranja
Limón
Mandarina
Marzo
Mandarina
Limón
Manzana
Naranja
Abril
Níspero
Cereza
Naranja
Manzana
Fresa
Limón
Mayo
Cereza
Manzana
Naranja
Fresón
Fresa
Limón
Níspero
Albaricoque
Nectarina
Naranja
Junio
Nectarina
Manzana
Albaricoque
Fresón
Cereza
Limón
Higo
Ciruela
Melocotón
Sandía
Melón francés
Frambuesa
Julio
Frambuesa
Albaricoque
Nectarina
Ciruela
Melocotón
Melón francés
Sandía
Melón de secano
Agosto
Higo
Albaricoque
Ciruela
Nectarina
Melocotón
Uva
Frambuesa
Sandía
Melón de secano
Septiembre
Sandía
Membrillo
Higo
Manzana
Nectarina
Melocotón
Melón de secano
Ciruela
Uva
Octubre
Melón de secano
Naranja
Melocotón
Clementina
Higo
Manzana
Membrillo
Caqui
Limón
Granada
Uva
Noviembre
Melón de secano
Clementina
Uva
Manzana
Naranja
Castaña
Granada
Limón
Caqui
Membrillo
Diciembre
Clementina
Naranja
Manzana
Mandarina
Limón
Caqui
Uva
Granada
Castaña