La mayoría de nosotros comemos pan a diario. Este es un alimento muy integrado en nuestra cultura y que suele acompañar prácticamente cualquier plato o preparación culinaria. Al ser un alimento de consumo tan habitual tenemos dos opciones, o escoger su mejor versión o buscar alternativas más saludables.

4 criterios para escoger un buen pan

Si vuestro objetivo no es dejar de comer pan, pero sí comerlo de la mejor calidad, estad atentos a esta primera parte del artículo, porque os damos las claves para escoger el mejor pan del mercado.

Huid de las cadenas de panaderías

Este es nuestro primer consejo. Este tipo de cadenas suelen utilizar harinas refinadas y aditivos para acelerar el proceso de fermentación. Esto lo convierte en un pan de peor calidad y menos digerible y suele aguantar mucho menos tiempo fresco.

Escoged una panadería que prepare el pan a “la vieja usanza”

Por suerte, cada vez es más fácil encontrar panaderías artesanales que huyen de lo industrial. En estas panaderías se suele dejar que la masa fermente de forma natural sin la necesidad de añadir aditivos ni acelerar los procesos. Los panes suelen fermentar largas horas y reposar, cosa que aporta ese sabor, acidez y fuerza característicos. Además, su lista de ingredientes suele ser reducida e incluye, de forma general, simplemente harina, agua, sal y levadura o masa madre.

Escoged cereales antiguos

Las variedades antiguas suelen ser más digestivas y generar menos problemas en personas con posible sensibilidad al gluten, además de proporcionar-nos más minerales y otros nutrientes. La espelta, el kamut, el einkorn u otras variedades son opciones muy interesantes.

Escoged la versión integral siempre que podáis

Las versiones integrales suelen tener más vitaminas, minerales y un índice glucémico menor (por lo que el azúcar en sangre se incrementa de forma más lenta). Así que, salvo casos concretos en los que la persona no tolere bien los integrales, será la opción más recomendable.

¿Y si quiero dejar de comer pan?

Ahora bien, si vuestra intención es reducir el consumo de pan, hay muchísimas alternativas interesantes en su lugar. Te explicamos nuestras opciones favoritas:

1-Wraps

Los wraps son una muy buena alternativa al pan. Nos permiten incluir una gran cantidad de relleno que, siempre que sea saludable, es una opción mucho más interesante. Si lo llenamos de verduras, de proteína de calidad y de grasas saludables, conseguimos fácilmente un plato nutritivo. Lo que más nos gusta de los wraps es que permiten comer más cantidad de relleno y menos cantidad de pan. Este punto nos interesa, ya que normalmente la gente suele ponerse una buena rebanada de pan con algo de relleno. Cuando lo que realmente nos interesa es el relleno, siempre que sea, repetimos, de buena calidad. Los wraps pueden ser de muchas harinas distintas, con gluten y sin gluten. Procurad, de nuevo, que estén hecho con harinas antiguas y su versión integral.

2-Papel de arroz

El papel de arroz también es una muy buena alternativa al pan. Al ser muy fino, nos permite que el relleno sea contundente. Lo mejor de este tipo de alimento es que se suele servir lleno de verduras crudas y muy variadas y acompañado de algo de proteína de calidad, que se traduce en un plato saludable.

3-Hojas de lechuga

Para los más paleo o ceto, esta opción es fantástica. Si vuestra intención es reducir totalmente el consumo de pan y cereales en general, podéis utilizar las hojas de lechuga como si fueran tacos. Pruébalas rellenas de carne picada, hummus y verduras o cualquier cosa que se os ocurra. Una versión muy fresca, ligera y lo más importante, saludable.

4-Tacos y fajitas

Los tacos y fajitas son otra muy buena alternativa al pan. Normalmente están hechos de grano de maíz molido. Intentad buscar siempre las opciones libres de aditivos y lo más puras posibles. Los tacos y fajitas también permiten que tomemos un plato muy completo, ya que son muy finos y permiten rellenarlos de todo lo que nos apetezca.

Al final, nos interesa escoger el pan más saludable posible o una de sus alternativas, pero también buscamos aumentar la cantidad de su relleno y hacer que sea muy saludable. ¿Qué no debería faltar para lograrlo?

  • Vegetales: deberían ser la base de todos vuestros platos. Podéis utilizar hojas variadas (rúcula, canónigos, berros, hojas de mostaza…), tomate, pimientos, calabacín, pepino…
  • Grasas saludables: un poco de aguacate, olivada, pescado graso, picada o crema de frutos secos, pasta de tahina…
  • Proteína de calidad: la proteína puede ser animal (pescado, carne, huevos…) o vegetal (hummus, tempeh, tofu, etc.).

Algunas opciones interesantes podrían ser:

  • Wraps proteicos con aguacate, col rizada y hummus
  • Wraps de kale, hummus, vegetales al horno y tofu marinado
  • Rollitos de lechuga con hummus y tempeh
  • Rollitos de lechuga con pollo picado, menta, cilantro, aguacate y lima
  • Rollitos de arroz rellenos de gambas, fideos de arroz y verduras asadas
  • Rollitos de arroz con verduras crudas, aguacate y hummus
  • Tacos con pescado, hojas variadas, tomate a dados, cebolla roja y guacamole
  • Fajitas con base de hummus, pollo marinado y rúcula

En varias de las propuestas incluimos hummus porque es una forma sencilla de incorporar proteína de calidad a la dieta. Sobre todo si tenemos pocas ganas de manchar y cocinar, ya que nos ayuda a tener un plato muy nutritivo en pocos minutos.

En La Piara encontraréis una gama de hummus deliciosa. Lo mejor de todo es que solamente lleva ingredientes 100% naturales y prescinde de cualquier aditivo. Podréis disfrutar de variedades como estas: