El “alga” agar-agar no es exactamente una alga, sino que es la fibra de un conjunto de unas siete algas, por eso, al cocinarla se queda esta textura de gelatina, que ayuda a saciar y calmar el estómago.
Ayuda a saciar y a combatir la ansiedad con agar-agar
Muy adecuado para saciar gracias a la combinación con agua, ya que forma esta sustancia en forma de gel. Concretamente, se hincha y reduce la velocidad del vaciamiento gástrico y produce un efecto saciante y apacigua la ansiedad. De esta manera, se tiene la sensación de estar lleno y se evita picar entre horas otros alimentos menos deseados.
Gracias a la fibra soluble que le caracteriza, en caso de estreñimiento, ayuda a los movimientos del estómago y a un vaciamiento correcto. Además, gracias a la fibra insoluble, produce un suave efecto laxante que aumenta el tránsito intestinal (efecto en el intestino delgado).
Es un tipo de alimento que no se suele encontrar en los supermercados más habituales, pero sí en herbolarios o casas de dietética. Lo venden en forma de copos o de tiras y dura para diez pasteles como mínimo. Además, con él se pueden hacer flanes veganos y otros postres con textura gelatinosa.
Fresas, golosinas naturales ricas en antioxidantes
Las fresas son las reinas de la primavera y cuidan todo el organismo. Gracias a su gran capacidad antioxidante, evitan el depósito de colesterol en las paredes de las arterias y mantienen el organismo en buen estado. Además, son muy ricas en fibra, que facilita el tránsito intestinal, y son muy diuréticas, es decir, aumentan la producción de orina, además de facilitar la eliminación de tóxicos a través de la orina.
Es altamente recomendable que las fresas sean ecológicas, ya que son de las frutas que más residuos químicos tienden a acumular en su interior.
Una ideal merienda nutritiva y rica
Al combinar las frutas con las “algas” agar-agar y la base de frutos secos y dátiles, conseguimos una merienda o postre de lo más nutritivo gracias a su alta densidad nutricional.
El agar-agar nos aporta la fibra necesaria; las fresas, la frescura y antioxidantes que el organismo necesita; los dátiles, dulzor sin necesidad de utilizar azúcar añadido; y las avellanas, las grasas saludables y proteínas que nos mantendrán saciados durante más tiempo.
De esta manera, es un postre o merienda que se aleja de los que producen un pico de glucosa en sangre y desequilibran nuestro querido organismo.
Receta de pastel de agar-agar y fresas
Ingredientes (Para 8-10 raciones):
- 10 fresas
- 1 plátano
- 6 dátiles o 10 higos secos
- 1 vaso de bebida de coco (u otra bebida vegetal al gusto)
- 150 g de avellanas
- 8 nueces de Brasil
- 1 c.p. de ralladura de limón
- Agar-agar en tiras o en copos
- 1 pizquita de sal
- 1 c.p. de canela
Elaboración
- Dejar los dátiles en remojo con agua.
- Verter en una cazuela 2 tazas de agua, 1 pizca de sal y calentar. Antes de que hierva, añadir 4 c.s. de copos de agar-agar o unas 10 tiras largas. Tapar y dejar que se cuezan durante 12 minutos.
- Paralelamente, en un robot de cocina, triturar las avellanas y las nueces de Brasil (se podrían hacer con otros frutos secos como almendras, nueces o anacardos), sin que quede harina. Incorporar los dátiles y triturar hasta que quede una pasta pegajosa.
- Colocar esta mezcla en un recipiente como base de la tarta. Se puede hacer con papel de horno para evitar que se pegue la mezcla y añadir aceite de coco.
- Una vez pasados los 12 minutos, añadir 1 vaso de bebida de coco (u otra bebida vegetal al gusto) y dejar que se mezcle todo bien. Verter la mezcla de agar-agar en el robot de cocina y añadir 8 fresas y el plátano.
- Triturar y esparcir la mezcla por el recipiente, incorporando más fresas por encima y otra decoración al gusto. ¡Imaginación al poder!
- Dejar enfriar unos 15-20 minutos y guardar en la nevera. Servir frío pasada 1 h.