A casi todo el mundo le gustan los bocadillos. Coger la comida con las manos, el contacto con el alimento es un acto que nos complace; nos hace sentir bien. Ahora bien, puede ocurrir que no queramos o no podamos comer harinas, cereales o levaduras, por ejemplo, y luego no sepamos de qué hacernos un bocadillo cuando queramos salir de picnic, de excursión, de viaje o, simplemente, para una noche que queramos permitirnos hacer una cena diferente a la del resto de días.
Personalmente me encanta esta receta porque es una evidencia clarísima que comer de manera saludable, sabrosa, vistosa, divertida y placentera no está reñido. Todos los ingredientes de esta receta son crudos, sin procesar, sin refinar, totalmente naturales, saludables 100%, energéticos y nutritivos. No utilizamos ningún ingrediente extraño ni difícil de encontrar, pero por la forma en la que los elaboramos y les damos forma, convertimos el plato en una explosión auténtica de colores, texturas y sabores!
En esta receta he utilizado tres ingredientes que aún no había usado en esta sección. Por un lado, el rábano, que, a pesar de ser poco usado en la cocina, tiene muchísimas propiedades y beneficios; por otra, las hojas de acelga y también el cilantro.
El rábano es un alimento que pertenece al grupo de las crucíferas, como la coliflor, el brócoli, las coles de Bruselas, la rúcula, los nabos y los berros. Las propiedades y beneficios que más me gustan de los rábanos, y que han hecho que los incluya en esta receta detox, son que previenen la retención de líquidos, estimulan el drenaje del hígado, favorecen la eliminación de toxinas del organismo, impulsan la producción de bilis, combaten el estreñimiento, favorecen el drenaje de la vesícula biliar, mejoran los trastornos digestivos y también la digestión de los alimentos. A partir de ahora no podrán faltar en la lista de la compra. Además, también se pueden comer salteados, al horno, fermentados o en zumos verdes.
La acelga es un alimento que ha sido muy mal usado en la cocina. La mayoría de personas la comen hervida mucho rato con un exceso de agua, por lo que queda insípida, sin gracia, con una textura desagradable y, encima, sin muchas de sus propiedades. Aconsejo comerla cruda, porque es una verdura de hoja verde (no les va bien el calor). Además, si la cocinamos al fuego perdemos dos grandes propiedades: su alto contenido en vitamina C -que nos ayuda, entre otras cosas, a absorber mejor el hierro- y su contenido en vitamina A -que se encarga de ayudarnos a combatir infecciones. Además, cuando se cuecen tanto tiempo, liberan más ácido oxálico.
Como alimento en una dieta detox, la acelga es interesante porque es rica en fibra y, por tanto, ayuda a evitar el estreñimiento y a expulsar tóxicos, tiene pocas calorías pero muchos nutrientes, tiene efecto diurético y también alcalinizante. El único inconveniente es que contiene bastante ácido oxálico, así que quien tiene cálculos renales o litiasis renal no puede comer a menudo. Tampoco se recomienda en una alimentación baja en histamina; en este caso se pueden sustituir por lechuga, y el aguacate de la salsa, por calabacín o remolacha -cruda o hervida-, por ejemplo.
El cilantro es una hierba aromática con propiedades digestivas, carminativas, depurativas y antiinflamatorias. También ayuda a regular los niveles de glucosa en sangre y a atrapar metales pesados -como por ejemplo, mercurio, aluminio y plomo- y, como el perejil -que también podríamos poner en esta receta como sustituto-, es rico en hierro.
A continuación os presento la receta, pero quiero dejar clara la idea de que se puede cambiar el relleno que propongo por las verduras que más os gusten y/o añadir algas, chucrut y verduras fermentadas, por ejemplo, para enriquecer aún más el wrap.
Ingredientes
Para los wraps
- 5 hojas grandes de acelgas
- 1 calabacín
- 1 pepino
- 2 o 3 zanahorias grandes
- 10 rábanos
- Germinados de alfalfa
Para la salsa
- 2 aguacates grandes
- Zumo de ½ limón
- Sal marina sin refinar
Preparación
- Lavar bien todos los ingredientes con agua filtrada o de calidad.
- Espiralizar por separado el calabacín sin pelar, el pepino pelado -o no- y las zanahorias, tal y como muestra este vídeo o esta otra receta. Si no se dispone de espiralizador se puede hacer con un pelador de verduras, con un robot de cocina o simplemente cortando las verduras como más apetezca. Reservar.
- Cortar los rábanos en trozos finos y pequeños. Reservar.
- Con una batidora o procesador triturar los aguacates con el zumo de limón y la sal marina sin refinar.
- Untar cada hoja de acelga con un poco de salsa y repartir el resto de ingredientes un poco en cada hoja sin llenarlas del todo para que se puedan enrollar bien.
- Una vez enrolladas, cerrar con palillos.
