Un carpaccio de calabaza y calabacín con aliño de pistachos y albahaca; refrescante, crujiente, ligero y supervitaminado. ¡Este verano nuestra piel estará más protegida que nunca! Una receta fácil y original; con dos hortalizas que, especialmente en crudo, aportan nutrientes que contribuyen a tener una piel más brillante y dorada.
La calabaza es rica en betacaroteno, un pigmento que contienen los vegetales de color naranja, rojo y amarillo del grupo de los carotenoides, componentes antioxidantes que se sitúan junto a la melanina en las capas externas de la piel aportando su coloración y protegiéndola de los radicales libres. Además, los betacarotenos son precursores de la vitamina A, una de las vitaminas esenciales necesaria para la formación correcta de huesos, el buen estado de la piel, de la vista, formación de glóbulos rojos y reparación de tejidos y mucosas.
El calabacín es muy ligero, por lo que constituye un alimento ideal para estómagos delicados y actúa sobre el sistema digestivo como emoliente, refrescante y sedante. Existe un hábito muy generalizado de considerar el calabacín como verdura casi exclusiva para guarniciones; sin embargo hay numerosas recetas en las que puede lucir como ingrediente principal. La pulpa del calabacín tiene un sabor sutil y resulta refrescante y muy agradable al paladar, ideal para consumir en crudo.
El calabacín, además, posee una muy buena cantidad de vitaminas excelentes para la buena salud y apariencia de la piel. Contiene un 93% de agua y está compuesto por enzimas y vitaminas A, B1, B2, B3 y C, como mineral principal cuenta con el potasio, y en menos cantidad calcio, fósforo y hierro. Estos nutrientes se encuentran sobre todo en la piel, por lo que hay que procurar consumirlo lo más firme y fresco posible y sobre todo de cultivo ecológico.
pistachos tostados con albahaca picadita. Me encanta el sabor de los pistachos y me gusta saber que aportan un sinfín de propiedades como la vitamina E, que viene de perlas en esta receta por su poder antioxidante y porque es la encargada de mantener la integridad de la piel, protegiéndola de los rayos UV y dándole defensas suficientes para prevenir el envejecimiento prematuro y el cáncer de piel.
Comer pistachos, además, puede prevenir la diabetes tipo 2, ya que contiene fósforo, importante para convertir las proteínas en aminoácidos y ayudar a balancear los niveles de glucosa. Una taza de pistachos tiene el 60% de la cantidad diaria recomendada de este mineral.
Todas las hierbas aromáticas tienen un propósito ya sea culinario o medicinal, pero el caso de la albahaca es especial. Ha sido utilizada durante miles de años en la medicina ayurvédica y es venerada como la “reina de las hierbas” además de ser considerada como una planta sagrada digna de adoración. Los beneficios de la albahaca sagrada incluyen, entre otras muchas, el aumento de la sensación de bienestar, el aumento de la función inmune y la prevención de numerosas enfermedades.
La receta
Ingredientes para 2 personas:
- ½ calabaza
- 1 calabacín
Aliño:
- Pistachos
- Aceite de calabaza virgen extra bio
- Zumo de limón
- Hojas de albahaca
- Sal y pimienta
Preparación en 2 pasos:
- Cortar finamente el calabacín con la piel y los trozos de calabaza y disponer en una fuente de forma alterna.
- Para preparar la vinagreta picar en un mortero los pistachos y tostar ligeramente en una sartén sin aceite; picar las hojas de albahaca finamente y añadir el resto de ingredientes. Regar el carpaccio generosamente y dejar macerar una media hora antes de servir.
Que lo disfrutéis, ¡Mucha salud!