«Comercio Verde» es un proyecto realizado conjuntamente entre el Instituto Municipal de Mercados de Barcelona (IMMB), el Comisionado de Economía Social y Solidaria y Política Alimentaria del Ayuntamiento de Barcelona y la Federación de Mercados Municipales de Barcelona (FEMM) que agrupa las entidades de comerciantes de los mercados municipales de la ciudad.
El principal objetivo es que los comerciantes de los mercados municipales sean prescriptores de alimentación sostenible y ofrezcan productos locales, ecológicos, de pequeños productores, de payés o de lonja y de elaboración propia. Es básico que la ciudadanía pueda acceder a estos productos con facilidad y que su distribución llegue a todos los distritos y barrios, con el consiguiente impacto sobre la salud, y ser un elemento dinamizador de los medios de vida del pequeño y medio campesino que les sirve.
Cabe destacar también que la potenciación de los productos ecológicos y de proximidad tendrá un impacto muy importante en la reducción de la huella de carbono y la lucha contra la emergencia climática.
En resumen, “Comercio Verde” significa:
- Producto local: con origen en Cataluña (se garantiza un producto fresco, de proximidad y de temporada)
- Producto ecológico: con certificado CCPAE (rápida identificación y valoración de los productos de la ganadería y la agricultura ecológica)
- Producto directo de payés: circuito corto
- Producto directo de lonja: circuito corto
- Producto de pequeño productor: circuito corto
- Producto de elaboración propia (con obrador autorizado)
¿Cuándo se inició la prueba piloto y cómo avanza el crecimiento del proyecto?
El pasado junio se inició el programa en prueba piloto en 6 mercados de Barcelona (Concepció, Llibertat, Sarrià, Ninot, Sants y Horta). Durante el mes de julio y después de llevar a cabo reuniones informativas en los 32 mercados alimentarios restantes, se fueron recogiendo las adhesiones de los establecimientos interesados y el compromiso con las condiciones para formar parte del proyecto. “Comercio Verde” supondrá un salto cualitativo tanto en el volumen de alimentos locales, ecológicos, de pequeños productores, de payés o de lonja que se consumen en Barcelona como en el hecho de que la ciudadanía tenga un acceso mucho más fácil a estos productos.
A mediados de septiembre se habían adherido al proyecto un total de 566 establecimientos alimentarios de las siguientes categorías de producto: fruta y verdura, legumbres, aves de corral y huevos, carnicería, tocinería, charcutería y quesos. Esto supone el 51,22% del total de establecimientos de estas categorías, con la participación de comerciantes de todos los mercados de la ciudad.
“Comercio Verde” es un proyecto que se consolidará durante el 2022 y al que se irán añadiendo otras acciones relacionadas con el concepto implícito más general de evolucionar hacia unos comercios más sostenibles, como la reducción de residuos en general y de plásticos desechables en particular o el uso de energías renovables y más sostenibles, entre otras, que ya se han iniciado y se desarrollarán en los próximos años.
