Este pudin supercremoso está hecho con trigo sarraceno germinado. Germinarlo no cuesta nada, basta con tenerlo a remojo toda la noche. Mediante este paso (que no requiere esfuerzo, tan solo previsión), el grano se reblandece, de manera que resulta muy fácil triturarlo por la mañana y convertirlo en un pudin.
¡Pero no solo eso! Mediante la germinación también hacemos que este grano sea muchísimo más fácil de digerir y asimilar, pues sus almidones se transforman en azúcares simples y sus proteínas en aminoácidos. Mediante el remojo, la semilla se convierte en un alimento altamente enzimático, en un alimento tonificante, reparador y nutritivo.
Este desayuno te ayuda a que una de tus comidas sea 100% crudivegana, sin que te des ni cuenta, lo que significa que no existe leucocitosis digestiva y, por lo tanto, tampoco un desgaste innecesario del sistema inmunitario.
Pruébalo. Ya verás que te sorprenderá lo delicioso que es este pudin. Sin cocción y totalmente vegetal.
La receta
- Cantidad: 2 personas
- Tiempo: 5 min
- Utensilios: batidora
Ingredientes:
- 250 ml de leche vegetal
- 1 T de trigo sarraceno
- 1 plátano pequeño
- 4 C de algarroba en polvo
- 1 c de vainilla en polvo
- 1 c de canela
- ¼ c de anís estrellado en polvo
- 1 C de mesquite (algarrobo blanco) opcional
- 3 C de azúcar de coco (o dos dátiles)
Extras:
- Frambuesas frescas
- Nibs de cacao
Preparación:
- Deja el trigo sarraceno en remojo en agua toda la noche.
- Por la mañana, lávalo bien bajo el grifo y escurre hasta retirar la película viscosa.
- Ponlo en la batidora junto con el resto de ingredientes y tritura hasta obtener una crema. Prueba y ajusta el dulce y/o las especias a tu gusto.
- Sirve con la fruta y los toppings que más te gusten (la fruta de bajo índice glucémico como las frambuesas o los arándanos es perfecta).
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