Cuando oímos la palabra “revuelto” enseguida la asociamos a un plato hecho con huevos; o bien, muchas personas que siguen una alimentación vegana, al tofu natural y ahumado. ¿Pero qué pasa si queremos hacer un revuelto vegano sin soja?
Una solución ideal es hacer la base del revuelto con coliflor; queda buenísimo y, además, como es verdura, es ideal para comer por la noche, cuando debemos tomar menos calorías y debemos evitar la carne. Además, gracias a la coliflor y a los shiitake, tenemos una cena muy rica en fibra, que nos asegura que, al día siguiente, el tránsito intestinal funcione correctamente.
Pero lo más relevante de este plato es que nos ayuda a evitar resfriados, gripes y virus, ya que todos sus ingredientes refuerzan el sistema inmunitario. Además, las setas shiitake tienen reconocidas algunas propiedades medicinales y anticáncer. Montse Reus nos cuenta estas propiedades –y muchas más– en un artículo muy extenso que incluye otras recetas.
La coliflor, aunque es blanca, es de la familia de las coles, y, por lo tanto, rica en fibra; pero también destaca porque contiene muchas vitaminas –como la C–, minerales y, como el shiitake, porque es rica en antioxidantes, es un anticancerígeno muy potente y refuerza el sistema inmunitario. Además, como tiene vitaminas del grupo B y magnesio, si comemos por la tarde, podemos aprovecharnos de su efecto relajante sobre el sistema nervioso. Siguiendo las recomendaciones de la chef Montse Vallory y la especialista Olga Cuevas, para que la coliflor preserve la vitamina C, la pondremos troceada en flores grandes sobre un cesto de bambú o vaporera dentro de la olla a presión durante 3-4 minutos. Una vez mezclada con las setas, la iremos troceando.
Los ajos tiernos son un alimento clave en cualquier revuelto. Como valor nutricional aportan un efecto antiséptico, antibiótico, bactericida, diurético y vasodilatador, ideal para el tratamiento tanto de infecciones como de trastornos metabólicos. Los ajos, pues, también refuerzan el sistema inmunitario y suben las defensas. Además, tienen unos principios activos llamados alicina y aliína, que también se encuentran en la cebolla, con propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y para reducir la tensión arterial. La cebolla también es diurética, sirve como antibiótico natural y se utiliza para luchar contra enfermedades del aparato respiratorio o digestivo. Además, cada vez se le atribuyen más propiedades antitumorales para inhibir el cáncer.
Ingredientes (para dos personas)
- 1 coliflor
- 8 setas shiitake grandes
- 4 ajos tiernos
- 5 cebollas tiernas
- Un poco de perejil
- Sal marina sin refinar
- Aceite de oliva
Preparación
- Limpiar bien la coliflor y cortar a flores grandes.
- Limpiar los ajos tiernos, la cebolla tierna y las setas shiitake.
- Poner la coliflor en el cesto de bambú o vaporera y, luego, dentro de la olla a presión durante 3-4 minutos.
- Cortar muy pequeños los ajos tiernos.
- Cortar la cebolla tierna a medias lunas.
- Cortar las setas shiitake a trozos finos y alargados.
- Saltear primero los ajos y la cebolla con un poco de aceite (o agua) y sal durante unos 5 minutos aproximadamente o hasta que estén dorados. Si se pega, poner un poco de agua en lugar de aceite.
- Añadir las setas shiitake y saltear todo junto 4-5 minutos más.
- Añadir la col, remover 1 minuto más y sacar del fuego.
- Trocear para que se parezca más a un revuelto.
- Servir con un poco de perejil.
- Opcionalmente, añadir algún tipo de semilla.
