Es cierto que cada vez hay una mayor conciencia del peligro que representa el uso irresponsable de plástico, además de que cada vez hay más tendencia a utilizar alternativas a la bolsa de plástico de toda la vida.

El plástico está por todos lados y, como bien explica Marta Costa en este artículo, la prueba es que la basura que se llena más rápidamente es siempre la de los envases. Se trata de un material tóxico que puede actuar como disruptor endocrino, sin mencionar que cada año produce la muerte de miles y miles de aves y animales marítimos.

Como explicábamos en este artículo, aunque es importante, reciclar no es suficiente y, además, es un proceso muy costoso. Y lo peor: solo el 10% del plástico que tiramos al contenedor amarillo se acaba reciclando efectivamente.

La compra en clave eco

Muchas tiendas y supermercados han dado ya el paso hacia las bolsas de compra sostenibles. Comienza a ser inaceptable utilizar cinco minutos un objeto que luego contaminará el planeta durante al menos quince generaciones.

Existen varias opciones disponibles para transportar la compra de manera más sostenible para el planeta: las bolsas reutilizables (tela, arpillera o rafia, entre otras), las fabricadas con materiales degradables o compostables (como la fécula de patata o maíz, o las de papel-madera). En el peor de los casos, pagaremos cinco céntimos de euro por una bolsa de plástico de toda la vida (ojalá pronto estén prohibidas del todo). Sin embargo, seguimos encontrando por todos lados las bolsas de rollo típicas de la sección de fruta y verdura, como única forma de llevarnos estos alimentos; o peor, piezas de fruta y verdura en bandejas de porexpan y envueltas en plástico. Como declara Costa, no vale comprar eco envasado en plástico de un solo uso.

Supermercados Veritas: pioneros en eliminar bolsas de plástico

Bolsa compostable de Veritas, elaborada con maíz

Hace casi diez años que, conscientes de la necesidad de reducir y eliminar el plástico de un solo uso, los supermercados Veritas han reemplazado las bolsas de plástico de la caja. En cambio, la empresa ha apostado por bolsas compostables, elaboradas con maíz, que tienen un coste de cinco céntimos de euro.

“Ninguna ley lo exigía, pero no podíamos ofrecer bolsas de plástico por convicción. Con esta iniciativa hemos ahorrado al mundo más de once millones de bolsas de plástico y eso nos convierte en el primer supermercado que elimina los bolsas de plástico”, afirma el director general de Veritas, Silvio Elías.

Otro gran paso que ha dado Veritas en la guerra contra el plástico, fue en 2016 al reemplazar las bolsas de rollo para la fruta y la verdura por bolsas compostables; sin duda, la gran asignatura pendiente de la mayoría de los supermercados.

Pero no se acaba aquí. Veritas se marca dos retos ambiciosos en materia de sostenibilidad: en 2019 prevé eliminar los plásticos añadidos de los productos que dependen directamente de su gestión y en 2022 desea tener una huella de carbono positiva. 

Actuemos, tenemos el poder

La única forma de revertir la situación de alarma medioambiental en torno al plástico será realizando un uso más responsable como ciudadanos del planeta Tierra. Además de apostar por un uso más razonable del plástico en el día a día, es fundamental que exijamos a las tiendas que nos faciliten bolsas de compra reutilizables, biodegradables o compostables, o que solo compremos en establecimientos que ofrecen esta opción. Como consumidores, tenemos el poder de conseguir que, por fin, desaparezcan de la circulación las bolsas de plástico, que ya han hecho tanto daño al planeta y que son un absoluto disparate.