Tenéis que probar esta deliciosa mezcla de especias, semillas y frutos secos llamada dukkah. La palabra dukkah proviene del árabe y significa ‘batir’ o ‘moler’, ya que sus ingredientes, después de ser tostados, se trituran.
El resultado es muy aromático y con un toque picante. Pero una de las claves del éxito que tiene es su textura crujiente. Lo cierto es que no se ha encontrado ninguna receta antigua, por lo que cualquier dukkah podría ser considerado “el auténtico”; eso sí, siempre que cumpla unas características básicas. ¿Os animáis a hacer en casa?
Su secreto, una combinación única de nutrientes
La base del dukkah lleva sésamo, cilantro, comino, sal y pimienta. Luego se le añade el ingrediente que distingue a esta mezcla de cualquier otra: los frutos secos. Ya tenemos una combinación única de alto valor proteico.