El agua de mar es poderosa. De hecho, desde tiempos inmemoriales, se han ido repitiendo todos los beneficios que puede aportar si nos sumergimos en ella o paseamos junto a la orilla mientras las olas nos acarician los pies.

Ya lo expuso el emperador Fu-Shi, pionero del uso del agua de mar y uno de los padres de la medicina tradicional china, cuando dio a conocer la importancia del consumo de algas y sales para mantener la salud. O René Quinton, un biólogo y fisiólogo francés que desarrolló una teoría en la que exponía la gran cantidad de fines terapéuticos que este elemento aportaba y que, además, dio a conocer la similitud entre la composición química del agua de mar y del plasma sanguíneo. O cualquiera de las terapias que se basan en el uso de distintos elementos marinos y el clima para tratar patologías, como la talasoterapia.

Por lo tanto, desde antaño conocemos, en mayor o menor medida, los beneficios que nos produce a nivel externo: su efecto antioxidante, su capacidad de reducir la ansiedad, sus usos para tratar enfermedades dérmicas o su efecto cicatrizante y desinfectante. Sin embargo, también sabemos que, generalmente, un interior sano se refleja en el exterior. Así que, ¿qué mejor que poder aprovecharnos de los beneficios que este regalo de la naturaleza nos aporta desde dentro?

Beber agua de mar nos ayuda a:

  • Incrementar la regeneración celular. Reconstituye e hidrata las células y favorece, así, un envejecimiento cualitativo.
  • Regular el medio interno y mantener el organismo equilibrado.
  • Aportar oligoelementos y sales minerales. De hecho, gracias a ellos, podemos obtener mejoras en distintos aspectos como en el sistema nervioso (ya que ayuda a reducir el cortisol y adrenalina, dos hormonas muy relacionadas con el estrés), en el nivel energético (nos ayuda a recuperar la energía tras el desgaste diario) o en mantener la salud ósea.
  • Regular la digestión y favorecer el desarrollo metabólico de las comidas. A nivel digestivo, el agua salada activa las glándulas salivales de la boca, lo que genera la liberación de la amilasa y ayuda a favorecer una digestión correcta. En consecuencia, ayuda a regular el tránsito intestinal, beneficia la asimilación correcta de nutrientes de los alimentos y evita digestiones pesadas. También ayuda a neutralizar la acidez estomacal y a calmar el apetito.
  • Mejorar la salud integral. Regula la presión arterial (si se consume de forma isotónica), limpia los pulmones de mucosidad, aporta dureza a los huesos y ayuda a regular el sueño, entre otros de sus múltiples beneficios.

Por desgracia, el agua de mar que encontramos en nuestras costas está muy contaminada y llena de desperdicios. Así, cabe recalcar la importancia de consumirla de calidad y tratada mediante los procedimientos necesarios hasta conseguir una bebida apta para consumo humano y con el aporte de beneficios expuestos.

Por suerte, actualmente el mercado nos ofrece esta saludable alternativa en varios formatos. Siovann es una de ellas y está dirigida, especialmente, a los que llevan una vida dinámica y socialmente muy activa, para que puedan disfrutar de todas sus propiedades. Esta nueva marca incluye dos productos que utilizan como base el agua de mar: Balance Water y Sparkling Balance Water. Ambas, además, están enriquecidas con zinc y magnesio, dos minerales que aportan múltiples beneficios.

El zinc es conocido por diferentes propiedades, entre las que destacan: la ayuda en el metabolismo de las proteínas, los glúcidos y en la síntesis de la insulina; la mejora del sistema inmunitario; intervención en la síntesis de hormonas sexuales; el mantenimiento de la piel, pelo, uñas y membranas mucosas o la cicatrización de las heridas.

Por otro lado, el magnesio también puede presumir de propiedades como ser un tranquilizante natural (efecto antiestrés); participar en la fijación del calcio y fósforo en huesos y dientes; prevenir la osteoporosis; mantener el equilibrio energético; o prevenir los cálculos renales, entre otros.

Pero ¿cómo podemos incluir esta bebida refrescante en nuestro día a día?

Es importante recordar que los beneficios y la contribución al mantenimiento de salud integral de este tipo de productos se potencian una vez se consuman de forma prolongada.  Por ello, incluir estas bebidas en nuestros hábitos diarios puede ayudarnos a mejorar el rendimiento orgánico, físico e intelectual y a sentirnos en equilibrio y bienestar.

El Balance Water o Sparkling Balance Water de Siovann son ideales para acompañar las comidas, para recuperarnos después de una buena dosis de ejercicio, maridar suculentas elaboraciones o saciar la sed en cualquier momento del día. Si preferís refrescar, calmar la sed o mejorar la digestión quizás el acompañante ideal será el Balance Water (una buena idea es mezclarla con limón, menta y estevia para sentir aún más su efecto reconstituyente). Por otro lado, si se es más atrevido, apetece dar un toque diferente a las comidas o sorprender a los invitados, aconsejamos Sparkling Balance Water.

Otra idea es preparar aliños para ensaladas (por ejemplo, limón, aceite, agua de mar y pimentón dulce) o incluirlo en batidos de frutas (para aumentar su capacidad energética), ya que este alimento es capaz de aportar matices olvidados y sabores que no podremos conseguir con la sal común. De hecho, podremos realzar el sabor original de los productos, aportar mayor cantidad de nutrientes y aumentar su palatabilidad.

Además de ser una bebida refrescante que cuida de nosotros tanto de forma interna como externa, cabe destacar que no contiene conservantes, azúcar, ni calorías. Así que se trata de una apuesta segura en toda regla.

¿Dónde podemos encontrarlo?

Hasta hace relativamente poco era inconcebible encontrar espacios con alimentos “raros” o diferentes para la mayoría, pero, gracias a la consciencia social, cada vez resulta más sencillo encontrar mayor cantidad de opciones en diferentes tipos de establecimientos. Siovann ha nacido en un momento en el que el mercado se está expandiendo y, por ello, podemos disfrutar de esta bebida tanto en restaurantes y bares, como en casa, si así lo preferimos, gracias a su tienda en línea.