Después de treinta-cinco años tras los fogones del restaurante vegetariano Paradís (Lérida), la familia Barri-Carles decidió empezar una nueva aventura gastronómica y empresarial y abrió el restaurante vegetariano hasta ahora más moderno que podíamos encontrar en la ciudad condal, el Teresa Carles. La continuación de este restaurante y el proceso evolutivo de la familia ha sido el Flax&Kale, que es –en palabras de los propietarios– “el hermanito del Teresa Carles”.
Soy testigo de cómo y cuándo nació el proyecto del Flax&Kale. Conocí a Jordi Barri, gerente del restaurante e hijo del tándem Teresa Carles-Ramon Barri en diciembre de 2012. Ambos estábamos tocados después de un viaje por la Costa Oeste de América del Norte, y pronto nos contagiamos el uno al otro del entusiasmo por el mundo y cultura gastronómica saludable. Jordi soñaba con un restaurante que priorizase la alimentación con productos solo de primera calidad, con estilos de cocción saludables, pensado para gente que quisiese comer desde pescado azul sin metales hasta platos crudiveganos, en el que los celíacos o intolerantes al gluten encontrasen un lugar, un restaurante que no utiliza azúcar refinado ni microondas, ni fritos, ni productos procesados, y sin duda, un restaurante que ofreciese zumos verdes prensados en frío y con superalimentos como el alga espirulina, la maca, la hierba de trigo, el azúcar de coco, las bayas de goji, el cacao crudo, las semillas de chía o la levadura nutricional. Pero no solo debía ser un restaurante, sino también un espacio para realizar formaciones, talleres y charlas, compartir mesa mientras disfrutas de un brunch al más puro estilo americano, beber un zumo verde en la barra, merendar un pudín de chía o una rosquilla sin gluten ni azúcar refinado, e incluso disfrutar de la terraza rodeado de un huerto urbano como si estuviéramos en Nueva York.
El proyecto del Flax&Kale empezaba a coger forma en la cabeza de Jordi Barri; solo había que trasladar la propuesta al resto de la familia. Conociéndolos, no me extraña que pronto se pusiesen a trabajar con pasión y dedicación total para hacer realidad este proyecto tan ambicioso. Aunque solo había pasado un año y medio desde la inauguración del Teresa Carles, toda la familia se lanzó a la piscina. Ramon Barri empezó a buscar locales hasta que encontró el espacio de 800 m2 que hoy ocupa el restaurante; Mar Barri se dedicó a buscar trabajadores, distribuidores de superalimentos y a materializar todas las ideas de Jordi, y éste último y Teresa Carles empezaron a reunirse y a viajar por Estados Unidos buscando inspiración para la oferta gastronómica saludable del nuevo restaurante.
Parte del proceso fue encontrar un nombre que identificase bien el nuevo proyecto. El Teresa Carles había sido un homenaje a la chef, a la madre, y para el restaurante nuevo hacía falta un nombre que reflejase lo que se podría encontrar en él: una cocina sin etiquetas, flexiteriana –sin carne, pero con pescado, rico en omegas–, moderna y que prioriza el concepto de alimentación real y limpia sin alimentos procesados ni fritos; que da lugar, en cambio, a los superalimentos más ricos en nutrientes del planeta. Así fue como nació el nombre de Flax (‘lino’, en castellano, un alimento rico en omega-3) y Kale (‘col’, en castellano)– un superalimento rico en clorofila, vitaminas, minerales y fitonutrientes muy de moda en Estados Unidos y ahora también aquí. Una auténtica declaración de intenciones: con este nombre la familia Barri-Carles nos dice que, si vamos a comer a su restaurante, podremos elegir platos totalmente saludables y nutritivos siempre cocinados respetando al máximo sus propiedades para que podamos obtener todos los beneficios de los ingredientes de primera calidad que han utilizado para elaborarlos.
He comido y me he reunido en el Flax&Kale muchísimas veces. Es un restaurante impresionante, con buenas vibraciones gracias a la luz natural que entra, los muebles cálidos y la cocina abierta, que demuestra la transparencia con la que cocinan, porque no hay nada para esconder. Para poder lograr unos locales y una imagen tan bonita y cuidada, la familia Barri-Carles trabaja con el estudio de interiorismo Francesc Pons, y para toda la gráfica y la web confía plenamente en Ferran Faidella y José María Monrás, del estudio Freshthink.
Como el Teresa Carles, el Flax&Kale abre cada día de la semana, del lunes a domingo, desde las nueve y media de la mañana hasta las once y media de la noche. De lunes a viernes podemos desayunar hasta las doce, cuando se abre la cocina para dar comidas hasta las cinco; después se hace una pausa para las meriendas, con propuestas saludables sin harinas ni azúcares refinados, hasta las siete de la tarde, y entonces empiezan a hacer cenas. Los sábados, domingos y festivos hay cita obligada con el Weekend Brunch, de diez de la mañana a cinco de la tarde, una experiencia gastronómica y social increíble.
Si decidís ir recomiendo leer la carta tranquilamente desde su web y mirar la leyenda de cada plato, que indica si un plato es crudivegano, si no tiene gluten, si está basado en plantas o vegano o si lleva pescado azul.
Acaban de estrenar la carta de otoño-invierno con platos deliciosos. Algunos de los platos estrella que he probado y que recomiendo absolutamente son el HealthyMezzeplatter, ideal para compartir con crackers de espelta y de kale, hummus y hummus negro con carbón activado, mutabal, un foie vegano espectacular, ensalada y verduras crudas; el Rawspaghettimeetsturmeric, unos espaguetis de verduras con pesto de cúrcuma; el Organgeisthenewhealthycuore, unos ravioli de espelta también con cúrcuma rellenos de zanahoria, boniato, pera, maca, levadura nutricional y harina de almendras; o una especialidad de Teresa que se llama VeggiePanangredcurry, que es una versión más saludable y sorprendente del famoso plato tailandés. Los postres Tastyandhealty (‘sabrosos y saludables’) merecerían un artículo solo para ellos, pero si debemos citar algunos, tienen el Roscón de Teresa, sin gluten, hecho con harina de almendras y coco con una mermelada elaborada con estevia, y Theveganvampiredessert, un postre considerado un superalimento porque no lleva gluten, es crudivegano y está hecho a partir de uno de los zumos que preparan ellos mismos con la técnica de la extracción en frío en el obrador que tienen en el mismo Flax&Kale y que se llama Teresa’s Juicery –se ve desde fuera; coge parte de la calle Tallers y hace esquina con la calle Gravina.
Así que si pasáis por delante del Flax&Kale por la mañana o a la hora de merendar no dejéis de entrar en el Teresa’s Juicery para comprar un zumo verde prensado en frío, sin pasteurizar ni azúcares refinados, totalmente crudivegano, lleno de enzimas, vitaminas, minerales, nutrientes y superalimentos. También os podéis llevar un batido sin lactosa o alguna leche vegetal; las botellas, de 400 ml, llevan una etiqueta con todos los ingredientes y propiedades, gracias a que, para elaborar la propuesta gastronómica, la familia Barri-Carles trabaja con la nutricionista Mireia Cervera y servidora, que les ayudamos a hacer que cada zumo, cada batido y cada leche vegetal sean lo más nutritivos posible, con una buena combinación de alimentos y validando las propiedades y beneficios.
Calle Tallers, 74B. 08001 Barcelona.
Tel: 933 175 664
http://www.teresacarles.com/fk/
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