Cada vez que tengo que crear una receta no puedo dejar de pensar en las consultas que me llegan, algunas sobre determinados problemas funcionales, otras sobre cómo poder hacer más sanos algunos platos, y sin olvidar que todo ha de ser fácil. Así llego, por ejemplo, a la de este mes, dedicada a los amantes del cacao y sus subproductos y dedicada también a quienes sufren estreñimiento. Si perteneces a ambos bandos, disfrutarás el doble de este desayuno.
La base es una buena horchata de chufa, la bebida del verano más popular y que normalmente se toma por la tarde en una terraza. Pues os invito a reinventarla en un desayuno, combinarla con cacao, chía y un poco de fruta fresca y empezar un día con energía y buen rollo.
Horchata: es una “leche” que se obtiene de la chufa, un pequeño tubérculo rico en minerales como magnesio y potasio, y que está considerado como un alimento antiquísimo (parece que hay datos de su consumo en Egipto, 4.000 años antes de la era cristiana). Es ideal para quienes no beben lácteos y para quienes no pueden beber leches de frutos secos por intolerancias o alergias. Nos ayuda a recuperar minerales cuando sudamos y en época de calor.
Cacao puro: hablamos de cacao en polvo sin azúcar, rico en fibra y en minerales. Por ejemplo, 1 cucharada contiene del 3 al 9% de la dosis recomendada de minerales como hierro, magnesio, manganeso, y zinc. También son interesantes sus flavonoides, de los cuales el cacao es rico en dos tipos: las catequinas, que tienen acción antioxidante.
Semillas de chía: cada vez son menos desconocidas para nosotros, sabemos que son ricas en fibra soluble (nos ayudan a combatir el estreñimiento y son saciantes), en ácidos grasos omega-3, y en proteína, pero siempre podemos aportar algún dato no tan conocido. Por ejemplo, que los guerreros aztecas comían semillas de chía para obtener un alto nivel de energía y resistencia, y luego ya se les quedó el mote de “runner’s food”; de hecho en lengua maya la palabra chía significa “fuerza”. Las investigaciones actuales le confieren propiedades benéficas para la salud de la piel, la salud cardiovascular, el sistema digestivo, la diabetes y para el sistema oseomuscular.
¡Bien! Después de un poco de conocimiento, vamos a la práctica.
La horchata ya es dulce, pero se puede agregar algo de endulzante natural si se necesita para contrarrestar lo amargo del cacao. La fruta se puede cambiar al gusto. ElaboraciónLa receta