El bienestar físico y emocional se consigue, en parte, siguiendo una alimentación saludable. Esto, los lectores de Soycomocomo ya lo sabéis y, gracias a la voluntad de Costa Brava Girona de mejorar la oferta de turismo de bienestar, empieza a haber novedades importantes.
Desde hace pocos meses, el exdirector del Hostal Empúries, un referente en establecimientos sostenibles de nuestro país, dirige el Hotel Santa Marta de Lloret de Mar, situado en un paraje paradisíaco, con un balneario nuevo y una oferta gastronómica de primer nivel y muy saludable. En la carta hay platos exquisitos, como el entrante de puerros, con remolacha y pistachos, y opciones de pescados y carnes con purés de verduras o acompañamientos similares. De hecho, el Santa Marta ya está tramitando el certificado AMED, sello que otorga la Agencia de Salud Pública de Catalunya a todos los establecimientos que siguen los criterios de la dieta mediterránea. De momento, el municipio de Lloret tiene dieciséis acreditados y ya hay más establecimientos, además del Santa Marta, que han mostrado interés.
¿Cómo debe ser la comida de un restaurante con el certificado AMED?
- Platos con verduras, hortalizas o legumbres como protagonistas.
- Presencia de aceite de oliva y de algunos productos integrales en la mesa.
- Oferta de segundos platos a base de pescados y carnes magras.
- Un buen surtido de fruta fresca y seca en la oferta de postres.
- Postres lácteos con poca grasa (opciones semi o desnatadas).
- Vino, cerveza o cava por copas o unidades individuales.
- Preparaciones culinarias muy saludables, sin demasiada grasa (cocciones al vapor, al horno, a la parrilla, a la plancha o salteados, por ejemplo.)
De hecho, Lloret Turisme ya hace dos años que trabaja intensamente para revertir el concepto de turismo que se conoce de su ciudad y uno de los puntos estratégicos es la salud. Por eso han creado la marca Lloreat Good, a través de la cual se han hecho formaciones a todos los jefes de cocina de restaurantes y hoteles de Lloret con la experiencia de la Fundación Alicia. Las formaciones presenciales y continuadas permitirán que los establecimientos tengan recetas saludables para ofrecer a los clientes y que a la vez dispongan de una oferta bien elaborada para el público vegetariano, vegano y con alergias y/o intolerancias.
Otra novedad importante es el Arkhé Hotel Boutique, el primer hotel vegetariano y vegano de la Costa Brava situado en el casco antiguo de Pals. El hotel Arkhé acaba de abrir (Arkhé en griego significa ‘principio’, ‘origen’, ‘inicio’) y se ha ubicado en una casa de 1630 en el caso antiguo de Pals que Marta Romaní y su familia han reformado con gusto y siguiendo un criterio sostenible.
Marta no es empresaria ni piensa hacer un negocio de volumen y escalable. Todo lo contrario. Hija de un naturópata y de una psicóloga holística, ha encontrado en la comida un camino para proyectar su magia personal. Ha sabido trasladar a cada rincón del hotel Arkhé su amor por las flores, la naturaleza, las mariposas, los colores de los prados y sobre todo su cocina y sus ingredientes predilectos: combina de tal forma los vegetales, las especies y las semillas que sus platos son cuadros simétricos y perfectos, como un Mondrian o un Rothko.
Nuevo hotel saludable: Se llama Arkhé y es un hotel boutique en el casco antiguo de Pals con oferta vegetariana y vegana.
En el Arkhé sirven desayunos totalmente saludables, sin gluten ni lácteos, veganos y vegetarianos basados en la nutrición consciente. Las habitaciones son espacios perfectamente restaurados, elegantes, con el blanco y los colores pastel como protagonistas, con productos ecológicos y sábanas de algodón.
Además, Marta organiza sesiones personales, talleres, cocina en directo, cenas por encargo y pícnics románticos o de grupo para los clientes que se alojan en el hotel y, por tanto, la gracia de ir al Arkhé es alojarse en él, pero también probar estas experiencias gastronómicas y mágicas en los campos del Empordà, donde cada detalle está medido con olfato y precisión.
Estos días, Marta ofrece la sexta edición de un plan de 21 días para restablecer el organismo. El plan se divide en tres semanas: la primera semana se hace una limpieza profunda y un trabajo para reconectar con el hambre real; la segunda se introducen alimentos nuevos, como ácidos grasos de buena calidad, y la tercera semana se integran todos los alimentos y se aprende autorregulación. También propone cursos abiertos más breves tanto de recetas como de cambio de hábitos o herramientas para reconectar siguiendo su criterio de nutrición consciente. A menudo, además, cuenta con la colaboración de la psicóloga Doia Riera para hacer sesiones emocionales y conseguir cambios profundos.
El hotel Arkhé es un lugar perfecto para organizar o regalar un fin de semana romántico en pareja, pues todo el entorno transporta y ayuda a hacer subir los decibelios del amor.