Al cabo de poco tiempo, el garaje se le hizo pequeño y pidió el de sus tíos. Con 160 metros cuadrados y una faceta comercial poderosísima, Dani incorporó a su hermano y a su madre en la empresa. Y del garaje pasaron a la primera fábrica, la de Moià. Tenía la voluntad de ofrecer un producto que buscara la pureza: sin aditivos, colorantes ni conservantes, con productos de proximidad, de temporada y ecológicos. En 2005 ya tenía esta conciencia, pero abrir una fábrica no es fácil, y no es hasta el 2012 que comienza a fabricar ecológico sus propios productos en Moià. Desde entonces, no obstante, en cinco años, Casa Amella se ha convertido en una empresa conocida y reconocida.
Ahora hace un año y medio que, de Moià, han crecido a una nave más grande a Artés, y se han convertido en la primera fábrica 100% vegana de Cataluña. Además, hace menos de un año que han abierto otra en Batea, en donde el pueblo y el Ayuntamiento los han recibido con los brazos abiertos. Bajo el sello “Ecobatea” ofrece un producto similar al de Casa Amella, pero con algunas diferencias, como por ejemplo el zumo de piña, que es de Costa Rica y, por lo tanto, no todos son locales: “Aquí nos permitimos ir a buscar las mejores frutas y, por lo tanto, la manzana es de Lleida, pero la piña no, claro. Por el resto, la filosofía de la empresa es exactamente la misma. Comencé con todo esto porque no encontraba cremas de verduras en el mercado que fuesen cremas y nada más: en todas había leche o conservantes; de todo, menos la verdura en cuestión. Y tenía claro que si hacía una crema de verduras, no la haría todo el año, sino sólo en el momento que sea temporada y los productores me la suministren. Y con los zumos tengo la misma pretensión: a menudo los zumos de fruta del mercado son néctares o están hechos a partir de concentrados, pero no de fruta real exprimida; o, quizás hacen una mezcla entre el concentrado y la fruta. Yo quiero encontrar en el supermercado un zumo de fruta ecológico de fruta real, prensada”.
Dani Amella ha recorrido todo el país buscando las mejores tiendas para distribuir su producto y, desde Portbou hasta el Delta del Ebro, no ha parado hasta que lo ha conseguido. Sus envases de vidrio tan característicos (el envase más respetuoso que han encontrado y con el cual envasan cremas, zumos, tomates y legumbres) los encontraréis en un millar de puntos de venta de Cataluña, y no siempre en tiendas estrictamente ecológicas. De hecho, la llegada al gran consumo de los productos ecológicos ya tiene experimentos como el de Casa Amella desde hace tiempo, y parece ser que el test está superadísimo.
Casa Amella, con 3 titulares:
- Artés es la primera fábrica 100% vegana de Cataluña
- Fabrican salsa de calçots ecológica, la única vegana y sin gluten certificada de España
- Actualmente están plantando cien hectáreas de cultivo ecológico con la Cooperativa de l’Aldea para dinamizar la zona a través de la Cámara de Comercio de Tortosa