La nutricosmética combina los beneficios de la alimentación, la complementación nutricional y la cosmética para aportar nutrientes que protejan la piel, aumenten su firmeza y ayuden a atenuar los signos externos del envejecimiento, a la vez que mejoren su aspecto. Con la ayuda de los complementos nutricionales se consigue potenciar el efecto positivo de los cosméticos naturales y obtener resultados inmejorables. Y es que cada vez hay más consumidores interesados por los centros de salud o health stores, porque cada vez hay más personas conscientes de la propia salud y del bienestar general que adoptan medidas preventivas mediante la trinidad: complementación, alimentación y cosmética natural.
Preguntas y respuestas para conseguir una belleza saludable
¿Qué productos no deben faltar en una dieta antioxidante?
Verduras, hortalizas de temporada y de buena calidad; frutas de temporada de cultivo ecológico, si es posible, ya que se ha visto que tienen más nutrientes antioxidantes que las frutas y verduras convencionales; aceites de primera presión en frío −no gastéis cualquier aceite−; semillas oleaginosas y frutos secos. Y, de vez en cuando −dos veces al año−, una complementación de nutrientes antioxidantes.
A veces, cuando seguimos una dieta de adelgazamiento o con la edad, suele aparecer flacidez o pérdida de tono. Además de practicar actividad física, ¿podemos atenuar este problema mediante la alimentación?
La alimentación será clave: interesa aportar una buena cantidad de proteína, a ser posible de origen vegetal, como puede ser el tempeh, las legumbres o un poco de pescado o carne de procedencia ecológica. Además, podemos complementar la dieta con silicio, mineral que participa en la síntesis de colágeno y que favorece la turgencia de la piel y evita la flacidez. También puede ser una buena opción tomar un complemento de espirulina o cáñamo, superalimentos muy ricos en proteína de alto valor biológico, ya que contienen todos los aminoácidos esenciales. Se pueden tomar mezclados en un zumo o con el muesli o crema de cereales de desayuno, por ejemplo. Estos dos superalimentos, además de favorecer un buen tono muscular −siempre que se haga ejercicio físico y una buena alimentación−, ayudan a depurar el organismo y le proporcionan la dosis óptima de nutrientes esenciales para la belleza de la piel, los cabellos y las uñas.
En verano, ¿qué productos debemos consumir para nutrir la piel y conseguir un bronceado saludable?
Alimentos ricos en betacaroteno y otros nutrientes antioxidantes y, si se puede, durante esta época, tomar un buen complemento rico en betacaroteno de fuente natural. Además de proteger la piel internamente, favorecerá un bronceado saludable y ayudará a mantenerlo durante más tiempo después de la época de sol. También es importante asegurar una piel hidratada. Esto se consigue con una alimentación rica en hortalizas y frutas, zumos de frutas naturales o de hortalizas y, por supuesto, unos buenos protectores solares con filtros minerales.
Fuente: Nutrición y antiaging de Victoria Baras
Nutrición ortomolecular y antienvejecimiento de Felipe Hernández
En realidad, todos los nutrientes son básicos para la belleza, pero los que tenemos que potenciar principalmente para notar efectos positivos en la piel son los nutrientes antioxidantes y con acción regeneradora, como es el caso de la vitamina C (presente en frutas cítricas, frutas del bosque, hortalizas) y que interviene en la síntesis de colágeno (sustancia que forma parte estructural de los tejidos), el betacaroteno (abundante en frutas, hortalizas, algas, polen) y la vitamina E (germen de trigo, semillas oleaginosas, cereales integrales, aceite vegetal de primera presión en frío): nutrientes clave para una buena nutrición de la piel.
Además, también es importante asegurar una buena salud del sistema nervioso, que está ligado íntimamente a la piel. De hecho, muchos problemas dérmicos se deben a un sistema nervioso debilitado o a un organismo estresado. Vitaminas del grupo B (cereales integrales, legumbres, levadura de cerveza, espirulina, Chlorella) y ácidos grasos esenciales omega-3, especialmente DHA (nueces, algas, semillas de lino, pescado azul), omega-6 (frutos secos, semillas oleaginosas, aceites vegetales de primera presión en frío) serán fundamentales para conseguir este equilibrio entre la piel y el sistema nervioso.
Otros nutrientes interesantes son el colágeno y el ácido hialurónico −difícil de encontrar en la alimentación, por ello, en según qué casos, puede ser recomendable la complementación para favorecer una piel hidratada y evitar la aparición de arrugas−, así como el zinc y el selenio.
Pero el primer paso para conseguir una piel bonita y un cabello saludable es evitar las toxinas: los alimentos que contienen sustancias de síntesis, el exceso de contaminación ambiental, la falta de respiración… A partir de estos cambios podemos continuar con las recomendaciones que semana tras semana ofrecemos en Soycomocomo.
Nutrientes que favorecen una salud óptima de la piel, el pelo, los ojos y las uñas
Piel joven, efecto antienvejecimiento: antioxidantes como la vitamina C (frutas cítricas, frutas del bosque, hortalizas…), el betacaroteno (algas, polen, frutas, hortalizas), vitamina E (aceites vegetales de primera presión en frío, germen de trigo, semillas oleaginosas).
Piel hidratada y fina: colágeno, ácido hialurónico, silicio (cola de caballo, yemas de bambú…).
Problemas de celulitis, piel de naranja: en este caso, es interesante hacer una cura con plantas depurativas, como el boldo, la bardana, la alcachofa, el diente de león…, para eliminar exceso de toxinas acumuladas en las zonas más críticas y también aportar nutrientes que mejoren el tejido conjuntivo, como los nutrientes antioxidantes antes mencionados y el colágeno y el silicio. Será importante activar la circulación de la zona con ejercicio, masajes linfáticos y respirar correctamente para favorecer la oxigenación de todos los tejidos. Complementos naturales como el Hydrocotile asiatica, la bromelaína (enzima de la piña) y el silicio pueden mejorar el aspecto de la piel de naranja junto con un plan nutricional adecuado.
Nutrientes para la salud del cabello y las uñas: necesitan los mismos nutrientes que la piel. Son interesantes los aminoácidos L-lisina y L-prolina (presentes principalmente en las carnes y los quesos, preferentemente de procedencia ecológica), y el metisulfonilmetano (MSM), un componente natural de muchos alimentos que contienen azufre −como la leche, la carne, el pescado de buena calidad− que mejora la elasticidad de la piel y el tejido conjuntivo y también problemas de piel como el acné.
Nutrientes para la salud de los ojos: antioxidantes como la luteína (yema de huevo, vegetales, frutas anaranjadas), la zeaxantina (yema de huevo, maíz, frutas anaranjadas), el betacaroteno, los ácidos grasos esenciales, especialmente el DHA (pescados azules −salmón, atún, sardinas, anchoas, boquerones… −, nueces, algas, semillas de lino, aceite de lino).