¿Cómo afrontamos esta semana de cambios? La mayoría ya hemos vuelto al trabajo y los niños vuelven a ver a los amigos de clase. El despertador, las prisas y los horarios marcan esta nueva etapa que nos acompañará a lo largo del año. Aunque siempre volvemos a retomar el ritmo de antes de las vacaciones, siempre nos cuesta arrancar, aunque a unos más que a otros, claro. Es por ello que os damos alternativas y consejos para arrancar con energía.
Recuperad los hábitos saludables. Si durante las vacaciones nos hemos dejado llevar por las malas costumbres, ahora es el momento de comenzar a recuperar los buenos hábitos para conseguir la energía que necesita el cuerpo. Poner en práctica los consejos que nos da semana tras semana Soycomocomo es una buena manera de lograrlo.
Aprended a manejar el estrés. Para muchos esta vuelta significa estrés, una reacción normal que se produce de manera automática en el organismo como respuesta a situaciones de alarma determinadas que nos ponen en fase de alerta; así podemos responder de manera adecuada ante situaciones que pueden parecernos desafiantes. Si este estrés se mantiene en el tiempo, pasa a convertirse en crónico y puede llegar a comprometer la salud del organismo. Por tanto, es fundamental que tengamos las herramientas suficientes para aprender a gestionarlo. Cada uno lo aborda de manera diferente. Para algunos, hacer deporte es la manera de descargar energía; otros encuentran una vía de escape en la lectura, las caminatas, el taichí, el yoga o la meditación. Lo que debemos tener claro es que, ante el estrés, el organismo hace trabajar más las glándulas suprarrenales y requiere más nutrientes. Para reforzar la energía de los riñones hay que aportar alimentos que los fortalezcan energéticamente, como legumbres, mijo, verduras redondas y de raíz, semillas oleaginosas… Y, por otra parte, se deben tener en cuenta ciertos nutrientes como la vitamina C, presente en las frutas cítricas y las bayas, las vitaminas del grupo B, necesarias para el buen funcionamiento del sistema nervioso y presentes en los alimentos integrales, sobre todo los cereales, el polen y la levadura de cerveza. Y finalmente es interesante tener en cuenta el magnesio, un mineral importantísimo que tiene un papel fundamental para la salud del sistema nervioso, ya que actúa como cofactor en la actividad de los neurotransmisores (dopamina, noreprinefrina y serotonina). La deficiencia de magnesio aumenta la sensibilidad al estrés. Encontramos buenas fuentes de magnesio en los cereales integrales y en las verduras y frutas de cultivo ecológico.
Comenzad a activar el cuerpo. Apuntaos al gimnasio, salid a correr un rato, id al trabajo en bicicleta o simplemente caminad. Quizás habéis tenido la oportunidad de moveros y de hacer deporte durante el verano, pero ahora, con el trabajo, podéis perder este espacio y ¡no lo podéis permitir! Debéis seguir activando el cuerpo para compensar las horas que pasáis sentados en una silla.
¿Con una dieta equilibrada necesitamos tomar complementos nutricionales?
Los hábitos de la vida moderna hacen difícil que podamos recibir todos los nutrientes que necesitamos cada día a través de la dieta. La ingesta de alimentos procesados, desvitalizados, el empobrecimiento del suelo, el consumo de bebidas estimulantes y tabaco, la contaminación, el estrés y otros factores hacen que, incluso siguiendo una dieta bien planificada y con productos de calidad, nos sea difícil obtener los niveles óptimos de nutrientes que necesitamos y hacen que, en circunstancias determinadas, sea necesaria una complementación nutricional natural. Una cosa está clara: si tenéis que tomar un complemento nutricional, dejaos asesorar por un profesional especializado.
Aumentad la energía. Si habéis comenzado con la energía bajo mínimos y os cuesta arrancar, al tiempo que recuperáis los buenos hábitos, volvéis a hacer actividad física y os habéis habituado a convivir con el estrés y aprendéis a gestionarlo, os puede ser útil complementar la dieta con un multinutriente específico que os ayude a conseguir el tono energético que necesitáis y así evitar caer en la tentación de entrar en el círculo de los cafés y bebidas estimulantes, que lo único que hacen es debilitar las suprarrenales y robaros minerales. Así que si necesitáis tomar un complemento nutricional, pedid asesoramiento a un especialista o bien, si vais a un centro de nutrición, aseguraos de que la persona que os atiende es nutricionista, naturópata o farmacéutica.
Elegid complementos nutricionales de fuentes naturales que os ayuden a aumentar la energía y la vitalidad. En el mercado encontramos muchos complementos nutricionales, multinutrientes específicos que aportan los nutrientes que necesitamos para afrontar el día con energía y vitalidad. Algunos son la espirulina, un alga muy rica en proteína, vitaminas del grupo B, vitamina E y minerales como el hierro, que favorece el incremento de la energía y la vitalidad. Es un complemento ideal para todos los deportistas y personas que tienen una actividad intensa. Por otro lado, está la maca, una raíz proveniente de Perú rica en L-arginina, zinc, hierro, vitamina E, vitamina C, vitaminas del grupo B, potasio y fósforo que proporciona mucha energía y mejora la concentración mental. También encontramos el ginseng siberiano, que es un adaptógeno que ayuda a reforzar la resistencia física y mental, y el ginseng rojo o coreano, que tiene una acción tónica importante. Aunque a veces el ginseng se ha asociado con el nerviosismo, hay que decir que este efecto lo dan solo los preparados de ginseng que han sometido esta raíz a temperaturas elevadas; en cambio, el ginseng que se ha tostado al vapor y luego se ha secado al sol mantiene todas las propiedades nutricionales sin afectar a los nervios. Por ejemplo, podéis encontrar todos estos componentes en el complemento Energy + de Eophy.